Pasteles – Tendencias

La macrotendencia PREMIUMIZACIÓN y EXPERIENCIA determina el crecimiento del mercado de productos con calidad mejorada y atractivos sensoriales, incluidos los que tienen pretensiones de calidad premium y gourmet, así como productos con un atractivo de complacencia consciente, es decir, con las características anteriores, pero también más nutritivos, con menos calorías y con ingredientes naturales y sostenibles, o sea, con los atributos de las otras macrotendencias del sector.

Las tendencias de consumo de pasteles en 2021 incluyen una mayor demanda de frescura y complacencia permitida, es decir, productos sabrosos que también ofrezcan beneficios para la salud del consumidor, como la inclusión de cereales, semillas y frutas. Los productos complacientes y que reconfortan emocionalmente (comfort food) han sido considerados como reductores del estrés durante la pandemia de Covid-19.

Las características asociadas a la salud y la nutrición son relevantes para más de la mitad de las personas cuando compran productos de panadería complacientes. Los productos capaces de establecer conexiones emocionales con los consumidores tienden a generar una mayor fidelidad a la marca.

Entre las varias tendencias relacionadas a la NUTRICIÓN y FUNCIONALIDAD, cabe destacar el enriquecimiento de los productos, como la inclusión de ingredientes probióticos asociados a la inmunidad e ingredientes vegetales que aumentan el contenido proteínico. En Sudamérica, más de un tercio de los consumidores desean encontrar en el mercado variedades de pasteles con un alto contenido en proteínas. Los consumidores también prestan más atención a las declaraciones del etiquetado relacionadas con el contenido de fibras.

Además de un mayor interés por una ingesta adecuada de nutrientes, la macrotendencia CONTROL y ADECUACIÓN se caracteriza por la preocupación que muchos consumidores están teniendo por equilibrar su alimentación diaria, intentando controlar el consumo de alimentos con altos niveles de sal, grasa, calorías e incluso gluten, aunque esto último está muy motivado por los mitos relacionados con este componente de la harina de trigo.

A nivel global, esta tendencia ha provocado un aumento de la oferta de productos reducidos en grasas, bajos en sodio y sin gluten. Entre las declaraciones del etiquetado que más llaman la atención de las personas están las que se refieren a las cantidades de calorías, azúcares, carbohidratos y sodio.

Asociada a las preferencias de los consumidores por lo placentero y lo saludable, la macrotendencia NATURALIDAD y AUTENTICIDAD señala la apreciación de opciones de productos percibidos como artesanales, naturales y sin aditivos artificiales. Aunque los productos tradicionales que contienen aditivos se consideran seguros, las industrias han desarrollado productos con fórmulas más simplificadas, con menos ingredientes y más familiares para los consumidores.

Entre las principales características que exigen los consumidores en los productos de panadería están la presencia de ingredientes “reales” y la ausencia de aromas y colorantes artificiales. Entre las tendencias del sector de panadería, a la hora de comprar, los consumidores más jóvenes han valorado la información sobre los alimentos relacionada con la salud, la sostenibilidad y la simplicidad de los ingredientes, exigiendo cada vez más autenticidad en los productos y transparencia en la comunicación por parte de los fabricantes.

La macrotendencia SOSTENIBILIDAD y TRANSPARENCIA representa la valoración de la forma en que se elaboran los alimentos industrializados y también la importancia que se concede a la responsabilidad social y medioambiental de los fabricantes. Esto ha provocado un aumento de la demanda de productos orgánicos y con certificación medioambiental. Por otra parte, los consumidores quieren información clara sobre los ingredientes utilizados y los tipos de procesos empleados en la fabricación.

Los consumidores jóvenes han pasado a valorar los productos sostenibles, sobre todo en cuanto a su impacto medioambiental, con especial atención a los productos ecológicos y a los que ofrecen transparencia y trazabilidad de los ingredientes utilizados. Más de la mitad de los consumidores sudamericanos afirman haber realizado cambios en su dieta en los últimos dos años para mantener un estilo de vida más sostenible y contribuir al medio ambiente. Entre los principales cambios están el consumo de productos más frescos, una mayor atención a los residuos y un mayor consumo de productos elaborados a nivel local.