¿LOS ALIMENTOS INDUSTRIALIZADOS CONTIENEN MUCHAS GRASAS SATURADAS Y TRANS?

En 2019, Ital y ABIMAPI realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 70 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. En promedio, el pan blanco industrializado tiene la misma cantidad de grasas saturadas que el pan francés. La mayoría de los panes integrales tienen más grasas saturadas que el pan integral casero, pero hay muchos productos sin grasas saturadas. La cantidad de grasas saturadas puede ser incluso inferior a la de los panes no industrializados. Los panes integrales tienen un mayor contenido en grasas saturadas, pero esto no es una regla general, ya que hay muchos productos sin grasas saturadas. Las grasas añadidas a los productos analizados varían entre aceites vegetales, margarina, manteca, manteca de cerdo, etc. La grasa hidrogenada se utiliza en 9 de los productos de la muestra.

En 2020, Ital y ABIMAPI realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 243 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. En general, las cantidades de grasas saturadas en las galletas varían mucho entre los distintos tipos de producto, con productos que contienen de 0,0 g a 6,0 g en porciones de 30 gramos. Existen versiones diet/light con reducción de calorías y grasas. Las grasas añadidas a los productos analizados varían entre aceites vegetales (girasol, sésamo, palma, soja, palmiste), aceite de oliva, manteca, margarina, grasa animal, etc. La grasa hidrogenada se utiliza en 48 de los productos de la muestra. Grasa interestificada en 3 productos.

En 2021, Ital y ABIMAPI realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 210 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. En general, las cantidades de GRASAS SATURADAS en los pasteles varían mucho entre los distintos tipos de producto, con productos que contienen de 0,0 g a 8,6 g. Las cantidades de GRASAS TRANS en los pasteles varían mucho según los ingredientes presentes en su formulación. La gran mayoría de los productos analizados se declaran libres de grasas trans. Las grasas añadidas a los productos analizados varían desde aceites de soja, canola, palma, girasol, coco, maíz y naranja hasta grasa vegetal hidrogenada, margarina y grasa de aceite de palma. La grasa hidrogenada se usa en 48 productos.

En 2021, Ital y ABIMAPI realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 269 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. En general, las masas no son un producto bajo en grasas saturadas. Sin embargo, las cantidades de GRASAS SATURADAS de las masas varían mucho según los ingredientes presentes en su formulación. Entre las alternativas para reducir las grasas saturadas están las mezclas o rellenos con más vegetales, carnes y quesos menos grasos o sustituirlos por productos similares. Las cantidades de GRASAS TRANS de las masas varían mucho según los ingredientes presentes en su formulación. La gran mayoría de las masas analizadas se declaran libres de grasas trans. Las grasas añadidas a los productos analizados varían entre soja, palma, girasol, margarina, crema vegetal, grasa de pato, grasa de pollo.

En 2020, Ital y ABIA realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 56 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. En general, las pizzas no son bajas en grasas saturadas, ya que ésta es una característica intrínseca de las materias primas utilizadas. Por ejemplo, la mozzarella tiene una cantidad relativa de grasas saturadas de aproximadamente el 60% del contenido de lípidos total. Sin embargo, las cantidades de GRASAS SATURADAS de las pizzas varían mucho según los ingredientes presentes en su formulación. Entre las alternativas para reducir las grasas saturadas están las coberturas con más vegetales, carnes y quesos menos grasos o sustituirlos por productos análogos en los que sea posible controlar el perfil de ácidos grasos utilizado para que tengan una cantidad relativa de grasa saturada de hasta el 20% del contenido de lípidos total.

Aunque algunos productos contienen cantidades superiores al VDR de 0,2 g, la gran mayoría de las pizzas analizadas se declaran libres de grasas trans. Las cantidades de grasas trans en las pizzas varían mucho en función de los ingredientes presentes en su formulación, teniendo en cuenta que se trata de una característica intrínseca de las materias primas utilizadas. La variación en las cantidades de grasas trans encontradas en los distintos productos está estrechamente relacionada con la cantidad de queso mozzarella utilizada, ya que este tipo de materia prima presenta niveles de grasas trans superiores al 1%, que es intrínseco a la grasa presente en la leche de vaca.

Las grasas añadidas a los productos analizados varían entre aceite de soja, aceite de palma, aceite de oliva, margarina.

En 2020, Ital y Viva Lácteos realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 150 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. La mayoría de los productos analizados pueden considerarse bajos en GRASAS SATURADAS e, incluso en los demás productos, las cantidades no son tan relevantes en función de las recomendaciones de ingesta diaria de 22 g. Es importante señalar que la grasa saturada no es un grupo químicamente homogéneo y que la grasa de la leche contiene algunos ácidos grasos, como el ácido butírico, ácido vacénico, ácido linoleico conjugado y ácido alfa linolénico, que tienen beneficios para la salud.

La grasa añadida a los productos analizados es sólo crema de leche.

En 2022, Ital y Good Food Institute realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 178 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. Las cantidades de GRASAS SATURADAS varían mucho entre los productos analizados, en función de los tipos de bases vegetales con que se preparan y de los ingredientes mezclados. En la muestra total, el 27,0% de las bebidas no contienen grasas saturadas, el 82,6% tienen valores de hasta 1,5 g/200 ml y el 97,8% están por debajo de 6 g en porciones de 200 ml. Las 4 bebidas con más de 6 g/200 ml están elaboradas con coco, una fruta con presencia natural de grasas saturadas. Las bebidas a base de CEREALES (97,1%) y LEGUMINOSAS (90,0%) tienen el mayor número de productos con hasta 1,5 g/200 ml. En general, las bebidas plant-based no son productos que contengan GRASAS TRANS. En la muestra de 178 bebidas plant-based, sólo un producto a base de LEGUMBRES contiene 0,1 g de grasas TRANS, mientras que los demás declaran 0,0 g por porción de 200 ml.

En 2020, tal y ABIR realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 217 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. En general, los zumos, néctares, refrescos y alimentos líquidos no contienen cantidades significativas de GRASAS. En el TOTAL de la muestra (217 productos), el 90,3% declaraba un contenido cero de GRASA, mientras que el resto tenía un contenido igual o inferior a 5 g/200 ml, lo que se considera BAJO según la legislación (menos de 3 g de grasas totales por 100 ml de producto).

En 2021, Ital y ABIS realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 180 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. Las cantidades de GRASAS SATURADAS de los helados varían mucho según los ingredientes presentes en su formulación. En promedio, en porciones de 60 g, los productos tienen 2,9 g de GRASAS SATURADAS (14,4% del VDR); el producto con mayor contenido tiene 8,4 g (42,0% del VDR) y el de menor contenido tiene 0 g (0% del VDR).

En promedio, en porciones de 100 g, los productos tienen 4,7 g de GRASAS SATURADAS (23,7% del VDR); el producto con mayor contenido tiene 14,0 g (70,0% del VDR) y el de menor contenido tiene 0 g (0% del VDR). La grasa añadida a los productos analizados es sólo crema de leche.

En 2021, Ital y ABIA realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 90 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. Las cantidades de GRASAS SATURADAS de las Hamburguesas varían mucho según los ingredientes presentes en su formulación. En general, debido a la composición natural de sus materias primas, los productos cárnicos tienen mayores cantidades que los vegetales.

Es importante señalar que la grasa, al igual que los carbohidratos, es una parte esencial de la dieta, ya que es una fuente de energía, proporciona ácidos grasos esenciales necesarios para el desarrollo y facilita la absorción de vitaminas liposolubles (A, D, E y K) en el intestino. También desempeña una importante función como reserva energética y estructural. Por otra parte, el consumo excesivo de grasas saturadas se asocia a un aumento de los niveles de colesterol malo o LDL, que puede depositarse en las arterias y provocar enfermedades cardiovasculares como infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares. Por eso la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece límites a su consumo. Lo ideal es que la ingesta de grasas saturadas no supere el 10% de las calorías ingeridas durante el día, lo que equivale a unos 21 gramos. Para las personas con factores de riesgo cardíaco, la cantidad sugerida es del 7%, es decir, unos 15 gramos.

Las cantidades de GRASAS TRANS en las hamburguesas varían mucho según los ingredientes presentes en su formulación, y sólo están presentes en una proporción menor (28%) de los productos cárnicos de la muestra analizada. Las grasas trans están presentes de forma natural en pequeñas cantidades en la carne y la leche de los rumiantes, como las vacas y las ovejas. Esto se debe a que determinadas bacterias presentes en el rumen de estos animales favorecen la biohidrogenación de los ácidos grasos que ingieren. Además de la carne, hay productos que utilizan grasas y aceites vegetales (en la muestra, 25 productos utilizan aceites y grasas vegetales y 1 margarina) en la preparación de hamburguesas, lo que también puede contribuir a que tengan un contenido de grasas trans superior a 0,2 g. Esto se debe a que las grasas trans pueden generarse en algunos procesos industriales, principalmente en la hidrogenación parcial de aceites de origen vegetal y animal. Las grasas añadidas a los productos analizados varían entre grasa de vacuno, cerdo y pollo, tocino, margarina, grasa vegetal de soja, grasa de palma, aceite de algodón, aceite de soja, aceite de coco, aceite de girasol, aceite de oliva virgen extra.

En 2022, Ital y ABICAB realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 483 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. En promedio, los chocolates tienen GRASAS SATURADAS en su composición, procedentes principalmente del cacao, pero las cantidades pueden variar según los ingredientes utilizados. Las cantidades de GRASAS TRANS de los chocolates varían mucho según los ingredientes presentes en su formulación. La gran mayoría de los productos analizados no contienen cantidades significativas de grasas trans. Según la muestra analizada, la mayoría de los chocolates industrializados no contienen GRASAS TRANS. Por ejemplo, de los 483 productos de la muestra total, sólo 4 tenían cantidades superiores a 0,1 g, debido a la composición de los rellenos y no a las características naturales del chocolate. Las grasas añadidas a los productos analizados varían desde aceites de soja, palma, girasol, coco y palmiste; manteca y grasa vegetal. Otras grasas utilizadas habitualmente en la industria: vegetal hidrogenada (en 6 productos), vegetal fraccionada (en 8 productos) y vegetal interesterificada (en 12 productos).

En 2022, Ital y ABICAB realizaron un estudio sobre nutrientes e ingredientes de 416 productos comercializados en Brasil, obteniendo los siguientes resultados. Las cantidades de GRASAS SATURADAS varían mucho entre los productos analizados, que pueden ser tostados o fritos, con una gran variedad de materias primas utilizadas en coberturas y otras preparaciones. En la muestra total, el 12,0% de los productos tenían valores de hasta 1,5 g; el 82,4%, de hasta 4,5 g; y el 17,6%, de entre 4,5 y 10,5 g en porciones de 50 g. Los granos de maní contienen naturalmente grasas saturadas, pero en cantidades inferiores a las encontradas para las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, y están libres de grasas trans. El análisis de la muestra de 416 productos industrializados revela que el 98,8% de ellos declaran 0,0 g por porción de 50 g. Sólo 5 productos de la categoría DULCES tienen entre 0,5 g y 4,2 g de GRASAS TRANS (en porciones de 50 g). Las grasas añadidas a los productos analizados varían entre aceite vegetal, aceite de soja, de girasol, de algodón, de coco, de maní, de oliva virgen y margarina. Otras grasas utilizadas habitualmente en la industria: vegetal hidrogenada (en 6 productos) y vegetal fraccionada (en 2 productos).